La Tercera

El confinamiento y la verdad más cruda de la pobreza energética en Chile

Por Nicola Borregaard, gerenta de EBP Chile

Encender la luz para leer, cocinar o comer. Cocinar para desayunar, almorzar y tomar once o cenar. Encender el calefont para tomar una ducha caliente o lavar la loza. Encender una estufa para calefaccionar la casa. Encender el computador para estudiar y/o trabajar. Esta rutina que muchos de nosotros no nos cuestionamos, requiere de un insumo básico: la energía. Pero, según datos de 2017 de la Encuesta de Presupuestos Familiares, el 22,6% de los hogares no logra cubrir los gastos básicos del hogar, incluyendo los servicios energéticos. El endeudamiento por cuentas eléctricas es, en buena parte, consecuencia de esta excesiva carga de pagos por servicios básicos en relación al ingreso total. Esta situación se agrava debido al aumento del consumo energético producto del confinamiento, el mayor desempleo y la suspensión temporal de contratos debido a la crisis, especialmente entre los más pobres. […]

 

Encuentra la columna de opinión completa en el diario La Tercera.